Alatariël Aenarion y mis accesorios de bordar.

Hace unas semanas retomé mi afición por el punto de cruz.

Siempre me ha gustado bordar, sobre todo en lino.

Mi hadita élfica de la costura, Alatariël, estaba encantada de verme bordar de nuevo. Esta hadita de la costura la hice en Noviembre del 2009. La carita está pintada a mano, le coloqué el pelo cosido a mano, los zapatitos también se los pinté. Las alas tienen perlitas cosidas una a una, y me costó mucho que quedaran rígidas, pero ahí están. Es un diseño original mio, y en mi opinión es una de las muñecas más bonitas que he hecho, aunque no se parezca a la mayoría de las muñecas que hago.

La quería hacer diferente, estilizada y elegante.

Y tiene mucho de mí.

Javi se encargó de hacer el carrete sobre el que está sentada.

Y ella me sirvió de inspiración para mi siguiente proyecto.

Y quiso la casualidad de que me regalaron varios retales de telas de cortinas

(la gente que me conoce ya no tira los retales porque saben que yo los reciclo).

Y pensé:

"voy a hacerme un saquito y un estuche para mis cuadritos de punto de cruz"

Elegí esta tela de flores porque me gustaron sus colores delicados, y usé una cinta al bies que imita al color del lino rústico para ribetear toda la labor.
El saquito es sencillo, con un cierre de velcro, caben el gráfico y la tela, y también el estuche.

En éste guardo los hilos, las agujas y las tijeras, a las que les até un acerico en forma de corazón.

A mi madre le encantó.

Y a mis amigas también.

Y Alatariël está disfrutando viendome de nuevo "en acción" (como dice Javi).

Así que ya saben, de cualquier trocito de tela se puede hacer algo bonito.