CUANDO CANELO ENCONTRÓ A CANELA.

¡Fue amor a primera vista!

Canelo estaba muy contento, pero también muy nervioso. Le llevó a Canela un ramito de rosas.

-Mimi, espero que le gusten.

-Seguro que sí, Cane.

Y para su sorpresa, Canela le regaló a él un mp3 para que escuchara su música favorita. Yo sabía que la música los ayudaría a conocerse mejor.

¡¿Ven que juntitos están merendando?!


Canela lo pasó tan bien, que le dio un abrazo enorme al Cane...



...y a él le alucinó tanto cariño de golpe!!!
-¿y si nos vamos al cine?-pregunto la Cane al Cane.
-Vale!

Sé que cuando mis dos ositos se conocieron se enamoraron porque ...

... EH!!! ¡¡¡ESAS PATITAS QUIETAS!!!

AMOR... AMOR...AMOR...

Canelo, Mi Osito de Franela.

Entre ayer y hoy nació Canelo.

Es un osito que no tiene mucho pelo. Está hecho de franela y puede mover los brazos y las patas.



No es muy grande...

...tiene los ojitos negros y saltones...

...y desde el primer momento quiso ponerse de pie.

Así que le busqué unos zapatitos cómodos...

...para que caminara y saltara todo el día sin cansarse.

Pero no quiere estar solo, por eso muy pronto conocera a Canela.

¡¡¡HOLA CANE!!!

Mi Niña Y Su Columpio.

Esta es Beth, una niña muy especial porque le bordé la carita a mano. Quise cambiar, y en vez de usar muselina, utilicé una tela muy suave que no se puede pintar debido a su textura aterciopelada.

Mientras la iba vistiendo posaba para mi sentadita al lado de mi máquina de coser.

Las botitas están cosidas a las piernas, y su cuerpecito tiene costuras para que pueda doblar los codos y las rodillas.

Lleva unos pantalones...


...una falda amplia...



...y un vestido precioso.

Javi le ha hecho un columpio para que se balancee y tome el sol en el jardín de casa.

En esta foto las botitas estaban terminadas, con sus lazos.

¡¡¡Muy pronto tendrá una hermana gemela!!!

Curando A Un Osito De Peluche.

Hace unos meses llegó a Villa Rústica un osito que tenía cerca de 50 años. Su dueño me pidió que le curara el brazo y que le hiciera una revisión completa para que no se volviera a poner malito, al menos por un tiempo, ya que con su edad era muy difícil no caer enfermo...

Lo primero que había que hacer era salvarle el brazo...


Lo ven, ya estaba mejor... pero aún no sonreía. Así que para que se sintiera mejor le cepillé todo el pelo, le devolví el brillo a sus ojos, le bordé los deditos de las manos y las patitas, y le zurcí todos los huequecitos que fuí encontrando por su cuerpecito...

...Y para mi sorpresa, mientras lo curaba, empezó a ronronear como un gatito. Era un sonido muy débil... ¡¡¡Tenía que conseguir que gruñera más fuerte!!!

Observé con mucho cuidado de dónde salía su sonido. Después de una operación delicada, volví a oir su voz, que por fin sonaba más fuerte.

Ahora había que rellenar su cuerpecito con algo que permitiera que su voz se oyese alto y claro.

Y después cerramos todas las heridas con unos puntitos de sutura. No le dolió nada. Durmió todo el rato...

Así que, como estaba dormido, aproveché y le arreglé el hocico para que pudiera oler mejor.

Casi, casi le hice la cirugía estética. Le puse relleno nuevo para darle forma al morro, le bordé una nariz, una boca...

...incluso tuvo una sesión de acupuntura gratis!!!!

Cuando despertó ya tenía nariz y boca nuevas, pero no podía sonreir por la anestesia.

Cuando se recuperó me sonrió sentado en mi cuarto de costura.

Recuerdo que cuando fui a devolvérselo a su dueño, yo lo llevaba en brazos como si fuera un niño. Me miraba, sonriendo y me hacía sentir muy feliz. La alegría que sintió aquel niño grande cuando volvió a ver a su oso de peluche hace que valga la pena realizar un trabajo tan bonito como éste.

La Gatita de Ry.

Hace tiempo hice esta gatita tan elegante en agradecimiento a mi amigo Ry. Inspirada en varias ilustraciones y en las muñecas Tilda, al final mi gatita quedó muy "francesita" debido a la boina y el foular rosa. Para que pareciera más "sofisticada" aún, le pinté los ojos en verde, le ricé las pestañas... en fin, ¡quedó muy coqueta!

Y ahora Ry tiene tres gatitas en casa.

Más Hadas En Villa Rústica.

Inspirada por la obra de Cicely Mary Barker me puse manos a la obra y pinté un biombo con el hada del Espino Albar y una cortina con una de sus haditas de la Hortensia. La tela que use fue un lino rústico que va mucho con la decoración de nuestra casa, y las pinturas fueron acrílicas, con las que me gusta mucho trabajar.

La estructura del biombo la hizo Javi y él también se encargó de fijar las telas a la madera.

La cortina quedó así de bonita colocada en casa, acabé la decoración con unas hortensias blancas sobre un pañito calado en amarillo.

El hada del Espino Albar, de Cicely Mary, pintada por mi!

Esta es una de las dos haditas de la Hortensia de Cicely Mary, la más pequeñita en realidad, porque me resultaba más bonita. La verdad es que disfruté mucho pintándola.

Para Rosa, Sandra y Alejandra.

Esta muñeca llegó a Villa Rústica hace unas semanas. Venía sin carita y me pidieron que le pusiera una muy especial. Por fin hoy ya puede sonreir.

La carita se la pinté a mano con acrílicos, pasteles y maquillaje.

Espero que a Rosa le guste cómo ha quedado ya que el resto de la muñeca es obra suya. Las cintas del cuello son ideas. Mañana estará con vosotras.

Un beso a las tres.

Mimi.

Gatitas Sobre El Tejado De Villa Rústica.

A veces de noche se oyen las pisadas de las gatitas que salen a pasear a la luz de la luna. El tintineo de sus cascabeles es casi un susurro. Menos mal que Wilson y Lulo tienen un sueño profundo y las dejan corretear por el patio.

Mis gatitas son un diseño de Tone Finnanger, al que le añadí cascabeles y pantaloncitos.